Las canaletas y canalones de nuestro hogar son una parte muy importante de la estructura general de la casa, porque son ellos los que evitan que el agua durante la época de lluvias se quede estancada en los tejados y en las paredes. Los canalones recogen el agua de lluvia y evita salpicaduras molestas en la terraza e impide que se ensucie la fachada. Es un valioso artefacto, y sólo debemos tener presente que recogerá junto con el agua todo lo que haya en el tejado: musgo, polvo, tierra, pero también restos más voluminosos, desde gorriones muertos a bolsas de plástico, pasando por los inquilinos habituales, culpables de la mayoría de los atascos: las hojas de los árboles. El mantenimiento normal de los canalones es sencillo y se reduce a limpiarlo para evitar atascos. Será necesario hacer limpieza preventiva en otoño y primavera, adelantándose a las fuertes lluvias.
Cómo limpiar las canaletas del tejado:
Si los canalones no están limpios harán que salgan manchas de humedad en la parte de dentro, que causan el crecimiento de moho y otros problemas estructurales. Lo primero es remover con un cepillo de cerdas metálicas toda la suciedad que es la que causa que la humedad se quede allí y haga que las canales se oxiden, se pudran y se corroan. Después lava los canales con una manguera que tenga bastante presión para que se termine de llevar la suciedad, comenzando con la parte inicial y llevando todo hacia el canalón para que se vaya hacia afuera. Este paso lo debes hacer varias veces, porque en la mayoría de ocasiones las hojas de los árboles se pegan a la superficie y son difíciles de quitar, en otras deberás quitar los codos y pedazos de los canalones para quitarles la suciedad. Si dentro de las canales hay óxido, debes quitarlo con una espátula y luego recubrir toda la superficie con cemento especial para techos para que no se vuelva a oxidar tan fácilmente.
