Si estás pensando en la mejor alternativa para disfrutar de tu terraza todo el año, hoy te damos todas las opciones para hacerlo con cerramientos de terrazas en aluminio.
La primera opción a elegir es si quieres que los techos sean fijo o móvil.
Los cerramientos fijos son techos robustos con diferentes vigas para crear la estructura, colocadas de forma calculada dependiendo del tamaño y de la zona a instalar.
En el caso de los móviles, tienen la ventaja de permitirte elegir si quieres que el techo esté cerrado para proteger tu terraza del tiempo o abierto, para aprovechar el aire fresco y el sol.
También podrás elegir el porcentaje de apertura, siendo el 50%, el 66%, el 75% o el 80% la parte móvil que se podrá abrir. El mecanismo puede ser manual o motorizado, además se le puede instalar sensor de sol, viento y lluvia para que se cierre o abra automáticamente.
Una vez tengamos claro si el cerramiento de aluminio lo queremos fijo o móvil, es hora de elegir el material del techo. Los cerramientos de terrazas en aluminio tienen tres posibles materiales, el policarbonato, el panel y el vidrio.
Los dos primeros, el policarbonato y el panel son unos materiales muy ligeros pero con una gran relación calidad-precio.
El policarbonato puede tener acabado translúcido o transaparente, mientras que el panel, son dos piezas de aluminio pegadas a un cuerpo de poliestireno que se puede lacar por ambos lados.
En el caso del vidrio, se trata de un material de la gama más alta, con más durabilidad y resistencia. El vidrio de los cerramientos de terrazas en aluminio tiene un espesor de 16 mm, con cámara, controles solares y bajos emisivos. Si se trata de techos fijos el espesor es de hasta 22mm.
Por último, podrás elegir los colores de las vigas, para que cualquiera de los cerramientos de terrazas en aluminio se adapte a tu casa o tu negocio.
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